por favor, qué idiotez. qué idiotez que los colectivos tengan el techo con relieve y entonces cuando uno baja un escalón se la da de lleno en la cabeza y todo el mundo te mira y para adentro se ríe (o quizá para afuera también, todos disfrutamos de la "desgracia" ajena en algún punto). y claro, uno tiene que fingir que no dolió, porque claaaaaaro, ponerse a llorar desconsoladamente no es lo más recomendable para un colectivo línea cien que viene lleno y atrasado por la famosa cristina, quien hoy arenga a todos sus amiguitos en la plaza de mayo.
otra idiotez. ¿a quién se le ocurre organizar semejante movilización complica-vidas? me pasé toda mi mañana en un colectivo, llegué cuasi tarde, aún si había salido mil horas antes porque a veces soy prevenida, y aún así desperdicié horas en ese colectivo, sabiendo que mi estadía en la facultad no iba a durar más de tres horas, solo para volver a tomarme el mismo transporte público y golpearme la cabeza y querer matar a todos, por inoportunos, molestos, molestos, molestos, me molestan, preferiría que se callen de una vez y vivan sus vidad solos, como todos. solos, como venimos y como nos vamos, solos. no sé por qué esa necesidad de relacionarse y tocar y mimar y abrazar y decir palabras de amor. no sé, no lo entiendo al menos hoy. quizá porque lo necesito tanto cuando a mi alrededor todos me miran en vez de preguntarme si mi cabeza está bien.
para qué tan enojada...
1 comentario:
te quedó chichón?
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